Alguien me dijo alguna vez que soy un incomprensivo, yo me defendi diciendo que simplemente era un tipo al que no le gustaba las vulgaridades humanas. Darío... un muy amigo.

Se me acusa de que yo me niego a ir en nada contra mí mismo

miércoles, 27 de agosto de 2008

Zafa el Bardo: "Histeria social: necesidad del drama"

Cotidianeidad de seres extasiados, co-dependientes del drama...
La historia es la siguiente:
Vida normal y tranquila.
Sin sobresaltos.
Encuentro casual destinado a ser.
Flasheo ocasional.
El simple comienzo sin querer de algo.
Encuentros planificados con reiteración.
Mucho todo: miradas, deseos, placer, alcohol, mensajes de texto, llamadas, mucho de todo.
Ritualización excitante.
Mucho flasheo delirante.
Hasta que las cosas cambian.
Ahora, el interes quedó a un lado.
Ya nada es lo mismo.
Ausencia de todo.
Palabras sin decir, pensamientos escondidos dan una otra vez vueltas en la cabeza, del otro ningún rastro...
Ilusión quebrada.
Como comenzó, todo ya acabo.
¿Qué paso?
Te zafaron!!





Cada tanto conoces a alguien, te gusta y comenzas a tener el hábito de verlo/la seguido y ni bien comenzas a sentir cierto apego, ya fué -o por que le zafaste de compromiso o por que te zafaron-
Aveces mucho quilombo y mucho drama pa mi gusto.
Zafa el bardo!!!!

viernes, 22 de agosto de 2008

ZAFA EL BARDO: clínicamente comprobado

Que tenés que leer las fotocopias. Que tenés que ir a la facu. Que tenés que terminar el trabajo práctico. Que tenés que ir a Alumnado a rellenar unos papeles. Que tenés que pagar las cuentas. Que tenés que ir al médico. Que querés irte unos días a tu casa. Que prendés la tele: inseguridad, Cristina, Cobos, el campo, los Juegos Olímpicos. ¡Uf! BailandoporunsueñolapeleadePetinattoyGvirtzDeAngeliseconvierteensuperhéroeloquierenrajaraEvoelburritovaajugaraMendozatantolíoporMessiyalfinaljuegaPityestápiradoCharlyestádrogadoMorenosigueenelINDEChayinflaciónlosmilicosisguenhablandodeterrorismomarxista…Aaaaaaahhhhhhhhhhhhhhhhh. ¡¡ZA-FA-LE AL BAR-DO!!

Amigas y amigos, a todos nos ha pasado. Llega un momento en nuestras vidas cotidianas en que pareciera que todo se conjuga para replantearnos si no hubiese sido mejor nacer paloma u oruga o araña o algún otro bicho medio boludo que no tiene tantos problemas. Pues bien, es en ese instante en que uno debe calmarse, reflexionar un poco y darse cuenta que los problemas son tales porque así los asumimos nosotros. Los problemas no son cosas con los que uno se choca, nosotros nos los creamos. Y por consiguiente, también nosotros podemos deshacerlos o, en todo caso, zafarle por un rato.

Para eso, lo importante es explotar el ocio, el entretenimiento, aquello que nos hace sentir bien aunque sea por un instante. Y entonces, un buen antídoto para ello es la música. La que sea, desde un chamamezazo del Chango Spaciuk hasta un jazzazo de Miles Davis; desde un cuarteto de la Mona Jiménez hasta una canción del Flaco Spinetta; cualquier cosa que te llene el alma viene bien a la hora de zafarle al bardo. ¿Cuántas veces se encerraron en sus piezas con el radiograbador a todo lo que da? ¿Cuántas veces se pusieron los auriculares de la compu y tan sólo se dejaron llevar? ¿Vieron que bien se siente?

Parece una boludez, pero no lo es. Una cosa tan sencilla como la música nos hace pasar un buen rato, nos da alegría, nos roba una sonrisa y hace que el día se torne un poquito más lindo. Así, sin darnos cuenta, le hemos zafado al bardo de la forma más sencilla, barata y hermosa del mundo.

La música, gran remedio para el alma. Ya sea escucharla o tocarla, siempre es aconsejable. Gracias Pequeños Duendes por invitarme a entrometerme un rato en su mundo, ahora las dejo porque tengo un cd de Javier Malosetti que me está esperando. Llegó la hora de que yo también le zafe al bard
o. Aunque sea por un rato.
Por Marcos Magaz

ZAFÁ EL BARDO: Las Historias Pasadas

Son pocas las cosas que alimentan tanto el ego, como el que te llame alguno de esos seres que dejaste –o te dejaron- en el pasado. De repente incrementa tu nivel de ‘amor propio’ y empezás a creer –aunque sea por un momento- que sos el centro del mundo, o el de ese ser. Todo esto es suficiente para que aceptes una cita con esa persona, y –nuevamente- te encuentres para ‘retomar esa olvidada vida amorosa’.

Pero, rodeado de ese cosmos narcisista, de las flores de colores y arco iris que evocan una época hippie de amor y paz, te olvidás de por qué esa historia se había terminado. De las horas de angustias que pasaste ‘comiéndote la cabeza’, preguntándote, por qué no te llama, por qué se comporta de forma tan histérica, por qué es tan celoso, o por qué prefiere a otras historias que a vos. Vale la pena volver a pasar por eso?

O por otro lado. Son las dos de la madrugada. Vos durmiendo, como cualquier noche de tus noches. Te despierta aquel llamado de ese ser, que hace meses desapareció de la faz de la tierra, para invitarte a tomar una cerveza. O los mensajes de texto de una historia no conclusa que lleva meses en el olvido, diciendo: “cómo estás!? Tanto tiempo!”.

Qué necesidad de responder? Cuál es el motivo lo suficientemente fuerte para que te vuelvas a encontrar? Si tu vida siguió perfectamente después de esa persona, quizá costó un poco volver al equilibrio, y eso solamente alimenta mi pregunta, por qué volver al bardo? Siempre hay nuevas historias por empezar, siempre hay otras personas por conocer. Que en tu memoria queden esos momentos copados de tu relación, para qué revivir los enojos, peleas o angustias, para qué retomar las razones por las que se terminó esa historia?

miércoles, 13 de agosto de 2008

ENVEJECERÁN LOS DUENDES??



(los que la conocemos SABEMOS que HAY que hacerle un homenaje)


JAQUELINE JUMPIN' FLASH


Duende tan particular

Muchas veces más duende que cualquiera

Aparece

Desaparece

Reaparece si no se la busca

Está, siempre está. Donde mires está.

Sonriendo... y eso mismo te hace sonreir.

Insustituible. Invaluable. Impredecible. Imparable. Invevitable. IMPOSIBLE!!

Transparente, pero tan compleja.

Analítica y perspicaz.

A veces tan feliz. A veces muy triste.

A veces tan hippie. A veces tan groopie.

A veces tan combativa. A veces tan glam.

Tan Sumo. Tan Spinetta.

A veces tan tolonga. Tan caú. Tan flashera.

A veces tan aventurera. Siempre aventurera.

A veces soñadora. A veces tan realista.

A veces tan poeta. Otras tan bardera.

Ella arraza. Ella invade. se mete en cada parte de tu ser.

Es un duende. Solamente DEJENLA SER!
(BRINDEMOS POR ESO!!)





domingo, 10 de agosto de 2008

¿Rito o no rito?

Y el principito volvió al día siguiente.
-Hubiera sido mejor -dijo el zorro- que vinieras a la misma hora. Si vienes, por ejempló, a las cuatro de la tarde; desde las tres yo empezaría a ser dichoso. Cuanto más avance la hora, más feliz me sentiré. A las cuatro me sentiré agitado e inquieto, descubriré así lo que vale la feliçidad. Pero si tú vienes a cualquier hora, nunça sabré cuándo preparar mi corazón... Los ritos son necesarios.
-¿Qué es un rito? -inquirió el principito.
-Es también algo demasiado olvidado -dijo el zorro-. Es lo que hace que un día no se parezca a otro día y que una hora sea diferente a otra. Entre los cazadores, por ejemplo, hay un rito. Los jueves bailan con las muchachas del pueblo. Los jueves entonces son días maravillosos en los que puedo ir de paseo hasta la viña. Si los cazadores no bailaran en día fijo, todos los días se parecerían y yo no tendría vacaciones.








Sin el rito, perderíamos el sentido de ciertas cosas.
Apartir de ella se legitiman prácticas, que con el tiempo se naturalizan...
Pero muchas veces, es positivo el quiebre, para despertarse y mirar más allá, ver mejor, sentir las cosas de verdad.
Creo más en el quiebre del rito que de su instalación en el cotidiano de todos los días.
Por que son esos eventos extraordinarios que rompen con la rutina, que provocan el necesario pasaje de paradigmas, cambio de ideas y pensamientos instalados por la sociedad.
Por un momento, todo es posible.
Los pensamientos fluyen..y un duende sonrié.